Sandfire Matsa ha concedido cuatro nuevas becas de estudios a jóvenes de su entorno próximo, procedentes de los IES Diego Macías de Calañas e IES San José de Cortegana. Esta iniciativa, que ha cerrado ahora su novena edición, tiene como objetivo apoyar la educación y promover la excelencia académica de estudiantes que, habiendo concluido el bachillerato en centros educativos del entorno, comienzan una nueva etapa con sus estudios universitarios o superiores. El importe de estas ayudas concedidas es de 2.000 euros cada una.

Hasta la fecha, el programa suma cerca de 35 becas otorgadas a estudiantes onubenses. Con ellas, se reconoce el esfuerzo y buen rendimiento durante el curso, a la par que se les ayuda a hacer frente a los gastos de matriculación del primer curso universitario o de Formación Profesional, así como de residencia, desplazamiento y compra de material educativo.

Los alumnos becados en esta edición han sido: Ismael Carretero y María Cortés, del IES Diego Macías de Calañas, que actualmente estudian Filología Inglesa en la Universidad de Huelva y Medicina en la Universidad de Lérida, respectivamente; y Álvaro Ramos y Eva María Ortega, matriculados en Física y Medicina, respectivamente, ambos en la Universidad de Sevilla.

El director financiero de Sandfire Matsa, Enrique Gallar, y la directora de Recursos Humanos, Nuria Fresco, se dieron cita con los jóvenes premiados para hacerles entrega del cheque con el que, desde la operación minera, esperan “acompañar a estos estudiantes, ejemplos de excelencia, en una exitosa carrera universitaria, en la que sigan demostrando su tenacidad”.

Sandfire Matsa genera unos 4.000 puestos de trabajo, entre directos, indirectos e inducidos. Su plantilla la forman unas 750 personas, de las cuales más del 90% tienen contrato indefinido y el 80% es del entorno próximo a las operaciones, con una media de edad que ronda los 42 años en el caso de los hombres y los 36,5 en el de las mujeres. Sandfire Matsa también prioriza la contratación de proveedores locales, apoyando así el desarrollo local de la región.

Por otro lado, Sandfire Matsa tiene un impacto global en el PIB onubense cercano al 5%, esto quiere decir que, de cada 100 euros del producto interior bruto de la provincia, en torno a 5 proceden de la actividad de la operación minera, gracias a la suma de pagos a proveedores, salarios y cotizaciones sociales, impuestos y tasas, inversiones y todo el efecto tractor directo e indirecto que genera en su área de influencia.

La actividad de Sandfire Matsa consiste en la investigación y explotación de yacimientos minerales y su tratamiento en la planta de procesamiento, ubicada al norte de la Faja Pirítica Ibérica, en el municipio de Almonaster la Real, en Huelva. Es titular de los derechos de explotación de las minas subterráneas Aguas Teñidas, Magdalena y Sotiel, todas ellas en la provincia onubense. Sandfire Matsa es propiedad 100% de Sandfire Resources Ltd, una empresa minera y de exploración que cotiza en la Bolsa de Valores de Australia (ASX: SFR).