El consumo de alcohol y otras sustancias tiene diferentes impactos, con situaciones no deseadas, en nuestro entorno social. Habitualmente existe una preocupación por esos consumos en la población juvenil, por lo que tradicionalmente se han desarrollado intervenciones preventivas en el ámbito escolar. Sin embargo, la población laboral no es en absoluto ajena a esta problemática.
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), a nivel mundial, se producen más de 3.000.000 de muertes anuales relacionadas directamente con el consumo de alcohol. Por otro lado, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que entre un 15 y un 30% de las víctimas de accidentes laborales podrían estar relacionadas con el consumo del alcohol y otras drogas, así como que los trabajadores con estos problemas presentan un absentismo laboral dos o tres veces mayor que el resto.
El alcohol y otras sustancias afectan de modo significativo a un 5% de la población laboral española y es natural que preocupe al mundo empresarial, que demanda apoyo para poder abordar esa situación. Se generan, obviamente, problemas de salud, conductas de riesgo, problemas familiares y económicos, absentismo, siniestralidad laboral, tensiones laborales, aislamiento social y problemas legales.
Es fundamental la implantación de hábitos saludables en la empresa, la implicación de todos los grupos de interés, desde la dirección hasta los propios trabajadores, porque se trata de una acción que, sin duda, beneficia a todas las partes y que repercute en el clima laboral, la productividad y la seguridad del propio trabajador afectado y de sus compañeros.
Proyecto Hombre está cada vez más presente en el área de prevención laboral. En concreto, se trabaja impartiendo información y formación como primer elemento de sensibilización, y también elaborando planes de prevención de consumo de sustancias en empresas, entidades y colectivos demandantes. En todo ello, es necesaria la implicación de representantes de las empresas y de los trabajadores en la elaboración de estrategias e implantación de las acciones.
El desarrollo de Planes de Prevención, adaptados a la realidad de cada organización, permite asesorar y capacitar respecto de la forma de actuación ante situaciones en las que el problema de las adicciones requiere ser abordado, identificando las situaciones de riesgo y estableciendo medidas preventivas. Todo ello, dentro del marco del Plan de Prevención de Riesgos Laborales, vigente en cada entidad.
Entendemos que la elaboración e implantación de estos Planes, deben diseñarse de forma conjunta y consensuada entre representantes de la empresa y representantes de los trabajadores, coordinados por el personal técnico de Proyecto Hombre.
Son mas de 30 años de presencia de Proyecto Hombre interviniendo en el mundo de las adiciones. Los inicios vinieron marcados por la aparición de los primeros brotes de sustancias que tanto alarmaron en nuestro país. El desarrollo posterior, los nuevos perfiles, otras sustancias, incluso adiciones sin sustancias han provocado la necesidad de seguir dando respuestas en cada momento. Respuesta adecuada, con experiencia y a la vez actualizada.
Un eje principal del trabajo ha sido la puesta en marcha de actividades preventivas tanto en colectivos de riesgo como en ámbitos de prevención universal. El mundo del trabajo, la empresa y cualquier actividad laboral no podía ser ajeno a la prevención y la intervención ante el riesgo de adicciones para una entidad con vocación de servicio a todos como Proyecto Hombre.
Francisco Herrera del Pueyo, presidente de Proyecto Hombre Sevilla.
