Aunque el ascenso de las temperaturas de las últimas semanas recuerde al periodo estival, seguimos inmersos en la primavera, la estación en la que eclosiona la vida en los campos y cultivos. Los árboles frutales están inmersos en el proceso de la polinización, que hace posible que las vistosas flores se conviertan en frutos. Esta frenética actividad es palpable en los campos que Pink Lady tiene en Lleida y Girona. Aquí las abejas son las grandes aliadas y responsables, en buena parte, de que año tras año, en torno al mes de diciembre, el consumidor pueda disfrutar de una manzana única. Por ello, Pink Lady, firme en su compromiso de respetar el medio ambiente y promover la concienciación social, viaja hasta Sevilla con su campaña Bee Pink, con la que da a conocer el papel que tienen las abejas para garantizar una buena cosecha, cómo se cultivan las manzanas, sus cualidades y las buenas prácticas de Pink Lady en la polinización. En la capital andaluza, Pablo Osborne, ingeniero técnico agrónomo y experto en permapicultura –disciplina que aboga por la menor intervención posible del hombre en el ritmo de las colmenas—, ha explicado las ventajas de esta forma de tratar a las abejas, en torno a la que existen efectivos tratamientos naturales para combatir las enfermedades que más afectan a estos insectos.

Esta jornada de concienciación en torno a la Apis mellifera y su determinante papel en la producción de alimentos se ha celebrado en el restaurante hispalense Torres & García (Harinas, 2), un espacio de Ovejas Negras Group que abandera la ‘cocina rústica’, con una despensa surtida por los mejores productores y recetas que realzan su sabor natural, valores muy en sintonía con los de Pink Lady.

Remedios naturales para curar a las grandes polinizadoras
Durante esta reunión, Pablo Osborne ejerció como portavoz de la Asociación de Permapicultura Andaluza, una entidad sin ánimo de lucro que realiza rescates gratuitos de colmenas silvestres de abejas melíferas para investigar, entre otras cosas, remedios naturales que curen a las abejas de sus enfermedades más comunes. Actualmente, lo habitual es recurrir a remedios químicos que, según Osborne, tienen varios inconvenientes: el primero es que el organismo animal va presentando resistencia a las dosis, y se van requiriendo cantidades cada vez mayores. El segundo es que esas sustancias sueltan vapores que contaminan la miel. Por el contrario, esta entidad está logrando resultados muy positivos con soluciones totalmente naturales y neutras. Por ejemplo, combatir con azúcar glass o aceite esencial de tomillo la varroa, un parásito que se cría en las celdillas de las colmenas y que provoca que las nuevas abejas nazcan deformes y mucho más pequeñas, por lo que acaban pereciendo en otoño. «Contra la nosemosis, la llamada ‘muerte silenciosa’ de las abejas, que afecta a su tracto intestinal, hemos comprobado la efectividad de proporcionarles jugo de manzanas fermentadas, limón o vinagre y agua, que reduce el pH del insecto y es totalmente inocuo».

La Asociación Andaluza de Permapicultura denuncia habitualmente, a través de las redes sociales, el desinterés generalizado de las Administraciones Públicas por las abejas melíferas. «Hay otros insectos polinizadores, pero las abejas son las responsables de la polinización del 85 % de las especies vegetales. Y están siendo arrasadas por los pesticidas cuando su supervivencia es decisiva porque, sin ellas, nos quedaremos sin alimentos. Y las instituciones parecen ajenas a esta problemática. Desconocen la importancia de salvaguardar las colmenas silvestres, que en muchos casos fumigan, algo totalmente ilegal, y no facilitan medios ni recursos para difundir el rol clave de estos insectos en el ciclo de la vida ni para concienciar a la población. Es imprescindible contar con fondos para educar a los ciudadanos, desde pequeños, en el respeto y conocimiento de un insecto sin el que el género humano perecería», esgrime Osborne.

Campaña para defender a las abejas
La campaña Bee Pink de Pink Lady está también dirigida a todos sus productores, para quienes la compañía organiza varias jornadas de sensibilización, y ha confeccionado una guía que recopila los conocimientos técnicos y puntos clave para proteger a las abejas en los huertos durante todo el año. El objetivo es que el 100 % de los productores Pink Lady® estén comprometidos con un enfoque sostenible. En España, las manzanas Pink Lady son cultivadas por 70 productores locales, que trabajan en pequeños terrenos de Lleida —150 hectáreas— y Girona —200 hectáreas— con métodos de cultivo respetuosos con el medio ambiente.

La polinización es clave para obtener una abundante cosecha, pero, sobre todo, para que sea de calidad. La presencia de abejas domésticas y silvestres aumenta los rendimientos de los huertos de cultivo e influye favorablemente en el peso, la forma, el número de semillas y en la calidad global de las manzanas. La vida de una flor varía entre dos y diez días, por lo que el periodo de polinización es muy corto. Es aquí cuando los insectos polinizadores, especialmente las abejas, juegan un papel fundamental para fecundar las flores y permitir que se conviertan en manzanas. Gracias a la colaboración con los apicultores, los productores introducen abejas en los huertos —cuando es necesario— durante este período, para garantizar la polinización natural y el éxito de la metamorfosis de la flor en fruto. El resultado son unas manzanas con un seductor color rosado, un aroma insuperable, una textura crujiente y un sabor especial, que la convierten en una de las frutas esenciales de la dieta mediterránea. Las Pink Lady® son unas manzanas únicas en el mundo, resultado del cruce entre las variedades Golden Delicious y Lady Williams. Además, la manzana Pink Lady® está marcada por su estacionalidad, debido a un largo ciclo de maduración de siete meses.

Pink Lady
Cultivadas en Lleida y Girona, las manzanas Pink Lady® son el resultado del trabajo riguroso y apasionado de 70 productores españoles que trabajan en pequeños terrenos y comparten unos valores de respeto a la tierra y al tiempo que necesitan estas manzanas para lograr una organolepsia especial. Por su color característico, su textura crujiente y su sabor inimitable, la manzana Pink Lady® se ha convertido en una variedad única que ha sido fuente de inspiración para Jordi Roca –el pequeño de los Roca, que ha diseñado varios helados de Pink Lady® para sus tiendas Rocambolesc– chefs como Pepe Solla, bartenders como Diego Cabrera, Miguel Pérez o Nagore Arregui e incluso diseñadores de moda como Ágatha Ruiz de la Prada.