Andalucía Económica ha celebrado el en Sevilla una nueva edición de su ciclo ‘Líderes de Nueva Generación’ que, en esta ocasión, tuvo como ponente a David Salinas, director general y socio de EPG Salinas Corredores de Seguros. El acto se celebró en la sede de Helvetia en Sevilla, estuvo moderado por Alfredo Chávarri, director general de la revista y el ponente fue presentado por Íñigo Soto, CEO de Helvetia Seguros España.

Soto habló sobre la sucesión en las empresas familiares: “En muchos casos, los sucesores no son capaces de asumir el liderazgo. Un gran ejemplo en la sucesión de liderazgo es el de David Salinas. Era la empresa de su madre, Elisa Poch, y después incorporó a su hijo. Elisa tiene un papel muy imporante en el mundo del seguro. David mejora la empresa y la hace crecer”.

“David Salinas es licenciado por la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla. Es mediador de seguros titulado, ha cursado el Programa Superior de Empresas Familiares por el Instituto de Empresa, y su trayectoria profesional está ligada al seguro y Consejo General de los Colegios de Mediadores de Seguros, entidad muy relevante dentro del sector”, explicó Soto.

EPG Salinas tiene sus orígenes en 1979 cuando Elisa Poch Gómez se inicia en la actividad como agente especialista en el ramo de vida con la entidad aseguradora GES, para con posterioridad continuar como agente con la compañía Banco Vitalicio. En 1986, obtiene el título de agente libre y empieza su nueva andadura como corredor de seguros. Pasa por diferentes oficinas, donde desarrolla su trabajo, siendo en 1994 cuando se incorpora al negocio la segunda generación. En el año 2000, funda junto a sus tres hijos la mercantil EPGSalinas, S.L., empresa principal del grupo y, en 2008, traslada su sede social y espacio de trabajo a las actuales instalaciones en el Centro Empresarial Rabanales.

Hoy, EPG Salinas se encuentra autorizada por la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones e inscrita en el Registro Especial de corredores y corredurías de seguros con la clave J-2105. El Grupo EPG Salinas lo componen varias empresas además de la Correduría de Seguros, las sociedades Bonatu 21 Inversiones y Servicios, S.L., y Alcanza Formación, S.L., ofreciendo entre todas un servicio integral en gerencia de riesgos y servicios.

Relevo generacional
David Salinas ofreció a los asistentes una clase maestra sobre la sucesión de negocio y el relevo generacional en la empresa familiar y es que, tal y como indicó, se considera un experto en experiencias tras haber vivido el relevo generacional de su empresa.

En su opinión, al sucesor se le presuponen valores y el sucedido precisa tres valores: amor (por lo que se hace, por lo que se ha construido y lo que se va a contruir), inteligencia y generosidad para que el proceso de sucesión funcione de verdad. En este punto, se refirió a su madre, Elisa Poch, que desde el primer día les abrió las puertas a lo que hacía y fue tan generosa como para ir exponiendo su empresa.

En una empresa familiar, según David, se mezclan sentimientos con gestión. El objetivo es evitar una situación sobrevenida, porque no se haya preparado el protocolo familiar.

Salinas dio algunos datos, por ejemplo, que en España se estima que 1,1 millones de empresas son familiares, el 89% sobre el total de las empresas, que a su vez general el 67% del empleo y el 50% del PIB. Asimismo, indicó que en Andalucía, el peso de la empresa familiar en el PIB es del 78%.

En la empresa familia se distinguen tres partes: familia –todos los miembros de la familia–, empresa –todas las personas que trabajan en la empresa– y propiedad –todas las personas que poseen acciones de la empresa–. Las bases deben ser profesionalización, renovación estratégica del negocio y relevo generacional. “En nuestro caso, pasamos de ser un despacho profesional a ser una empresa y, posteriormente, una empresa familiar. Un 40% de la gestión en la empresa familiar es negocio; y el 60% restante es gestionar emociones (caras tristes, sonrientes, preocupaciones, miedos…)”, confesó. Para una correcta gestión, deben existir unas reglas en la empresa:

• Prohibido en el trabajo cualquier conversación negativa sobre miembros de la familia.

• Prohibido el uso indebido de fondos de la empresa con fines personales.

• Los miembros de la familia que trabajan en la empresa reciben el mismo trato que los trabajadores que no pertenecen a la familia, sin mayores o menores privilegios, oportunidades, presiones, recompensas y oportunidades.

• Hay que alabar de manera pública los logros y el trabajo bien hecho a los miembros de la familia, pero igual que el de cualquier otro empleado.

• Hay que corregir a los miembros de la familia en privado en relación con los errores de mala actuación o mal comportamiento, pero igual que con cualquier otro empleado.

• Aclarar la finalidad de la empresa familiar, tanto con los miembros de la familia como con nuestros colaboradores.

• Compartir el éxito y alentarlo para todos los componentes de la firma.

Pero sobre todo, se debe transmitir el amor y la pasión por la empresa. Y para ello, no se puede amar lo que uno no conoce, como decía Miguel Ángel Gallo.

En opinión de Salinas, también son necesarias unas reglas en las familias: Los problemas del trabajo no llegan a casa; la empresa no es el único tema de interés; y la empresa no se utiliza como criterio para medir la relación familiar y la valía individual. Además, si un componente de la familia no puede o no quiere incorporarse a la empresa no es menos que otro.

David Salinas habló de las diferencias entre propiedad y dirección. La propiedad es cuestión de amor; cuestión de quién es uno; cuestión de apellido; cuestión de pertenencia a una familia; cuestión de hacer cosas que estén bien; y viene dada. Mientras que la dirección es cuestión de talento y habilidad; cuestión de lo que uno puede hacer; cuestión de actuación; es educación, formación y experiencia; cuestión de hacer las cosas bien; y se gana.

A su entender, “el hecho de que alguien posea algo no significa que ‘tenga’ que dirigirlo, que ‘deba’ dirigirlo o que ‘sepa’ cómo hacerlo. No es fácil pertenecer a una familia empresaria ni ser hijo de un empresario”.

Y es que la familia debe estar al servicio de la empresa: “Ninguna de las dos saldrá bien parada si la empresa se gestiona de forma que sirva a la familia. En la empresa familiar, la clave no es la familia, sino la empesa”, aseguró. David puso algunos ejemplos de fracaso: sueldos diferentes, se usa a la empresa como privilegio y no como responsabilidad; vehículos diferentes, no pueden existir privilegios económicos; prestaciones diferentes, no pueden existir privilegios de posición; y posiciones diferentes, la empresa no puede estar dirigida por miembros de la familia sin reunir las condiciones adecuadas. Según manifestó Salinas, “en una empresa familiar, los asuntos familiares no deben represantar papel alguno en el lugar de trabajo. En el trabajo, para tener éxito, las cosas deben ser profesionales”.

¿Cuál es el secreto?, preguntó David. Amor, inteligencia y generosidad, además de un protocolo familiar, “que es una herramienta que se debe elaborar cuando la empresa va bien, porque es cuando estamos más contentos y somos más generosos”, afirmó Salinas. Se trata de un proceso de diálogo que es la clave. No es algo muerto, está vivo y hay que trabajarlo. Se debe conocer el esfuerzo del fundador. Seríamos miopes de lo contrario”.

Entre los temas a recoger en el protocolo familiar se encuentran: las consideraciones sobre la familia empresaria (sobre el fundador, los miembros de la familia, su filosofía y valores, los orígenes, el modelo de empresa familiar y el deseo de continuidad…); el alcance y enfoque del protocolo familiar (objetivos, vigencia y condiciones para la modificación del protocolo, definición del código ético y comportamiento para los miembros de la familia y para la empresa; canales de comunicaicón entre familia y empresa); acuerdos sobre el gobierno de la familia empresaria (objetivos, funciones, composición y normas de funcionamientos de los órganos de gobierno de la familia); acuerdos sobre el gobierno de la empresa familiar; acuerdos sobre el trabajo (condiciones de acceso al trabajo, condiciones de trabajo de los familiares, salida de familiares, remuneración de los familiares); y derechos económicos y de propiedad (dividendos, criterios de valoración de acciones o participaciones, ventas de acciones o entrada de terceros ajenos a la familia en el capital, concesión de garantías o préstamos, políticas de exclusión de socios familiares y protección de los fundadores).

En su opinión, “todas las empresas familiares tienen los mismos problemas desde el punto de vista de las emociones. Hemos pasado de ser yo el hijo de Elisa a ser Elisa la madre de David”, aseguró. Salinas concluyó dando unas recomendaciones para sobrevivir a la empresa familiar: distintas posiciones pueden ser válidas para el éxito de la empresa; siempre habrá problemas que resolver; dejar espacio a los que vienen; hacer que la empresa gane dinero; si le cuesta ser generoso, vender; ser humilde; dedicar tiempo a la empresa y a la familia; dejarse asesorar –hay organismos que le pueden ayudar como la Asociación Andaluza de la Empresa Familiar (AAEF) de la que él forma parte–; y no obsesionarse con la empresa familiar, porque no tiene solución, aunque se pueden prevenir muchas situaciones.

A su entender, la empresa no es solo gestionar dinero, tambiés es generar un sueño. Además, la empresa familiar no puede ser el primer puesto de trabajo, hay unos niveles de formación.

David trabaja junto a sus hermanos Carlos y María José. La empresa suma 12 millones de euros en primas, que suponen unos 2 millones de de comisión, y cuentan con unos 20 empleados. “El sector de los seguros es generador de empleo, es muy estable, solvente y serio”, concluyó Salinas.

Sobre el foro
Hasta la fecha, han pasado por este ciclo los siguientes empresarios:

• Manuel Contreras, presidente de Azvi.
• Gonzalo Guillén, director general de Acesur.
• José María Pacheco, presidente de Konecta.
• Estanislao Martínez, presidente de AGQ Labs.
• Arancha Manzanares, vicepresidenta ejecutiva de Ayesa.
• Borja de Torres, consejero delegado de Acotral.
• Luis Sánchez, vicepresidente y consejero delegado de Sando.
• Jesús Barranco, consejero delegado de Alhóndiga La Unión.
• Enrique Ybarra, presidente y CEO de City Sightseeing Worldwide.
• Romualdo Madariaga, presidente de MP.
• Francisco Pumar, director general de Grupo Insur.
• Juan López, director general de Silos Córdoba.
• Antonio Fagundo, director Jurídico, Marketing y Expansión de Masaltos.com.
• Eduardo Pérez, presidente de Grupo Terry.
• Carlos Contreras, presidente de Vimac.
• Carmelo Justo, del Grupo Reciclados La Red.
• Ana Llopis, gerente de Grupo Llopis.
• Miguel García, Managing Director de Isesa.
• José Manuel González, consejero delegado de Howden Iberia.
• Inmaculada Ponce, directora de Marketing de Scalpers.
• Daniel Alberola, General Manager de Mr. Boho.
• Manuel Borrego, director del Mercado Lonja del Barranco y socio director abogado de Suma Legal.
• José Mª Piñar Celestino, CEO de Elmya.
• Andrés Bermúdez, CEO de AB Café, Sevillana de Café, S.L.
• Rosa Vañó, directora comercial y propietaria de Castillo de Canena.
• Adrián Ortiz, CEO de Xtraice.
• Blanca Torrent, directora general de Aceitunas Torrent.
• Tomás García-Figueras, socio-director de SDOS.
• Miguel Ángel Tamarit, vicepresidente JR del Grupo Faasa y director de la división de Negocio y Desarrollo Internacional.
• Manuel Sánchez, CEO de 4 Gasa.
• Reyes Queraltó, presidenta del Grupo R Queraltó.
• Rocío Vázquez, CEO y directora médica de Clínica Rocío Vázquez.
• Javier Luque, gerente de Grupo Nueva Dietética.
• Antonio Lappí, director general CEO de Grupo Lappí.
• José Antonio Alarcón, socio fundador de Tiendanimal.
• José María Domínguez, director general de Refractarios Alfran.
• Francisco Jiménez, responsable de Comercio Internacional de Iluminaciones Ximénez.
• Guillermo Beltrán, director adjunto de Famadesa.
• Alejandro Costa, CEO de CYG IT Solutions.
• Vicente Granados, director general de Instituto Español.
• Iván Ferrer, director general de Gisela.
• Gregorio López, CEO y fundador de Mox.
• Ana Jiménez, experta en marca personal.
• Francisco Espejo, presidente ejecutivo de Onesta.
• Luis Galán, director general de Viñafiel.
• Juan Ramas, CEO de La Caseta.
• Raquel Parrilla, directora general de Transportes Miguel Parrilla.
• Francisco Díaz Cadenas, presidente de Grupo Díaz Cadenas.
• Juan Carlos Narbona, CEO de Narbona Solís.
• José Carlos Hurtado, director general de Enerplus.
• Jesús Valle, director general de Grupo Juvasa.
• Virginia González, presidenta ejecutiva de Grupo Dian, y presidenta de la Confederación Andaluza de Empresarios de Alimentación y Perfumería.