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– ¿Cómo y cuándo surge la idea de crear la empresa? ¿Quiénes fueron sus fundadores? ¿Cómo ha sido su evolución?
– Clover Bioanalytical Software (acortado como Clover Biosoft) fue fundada por Luis Mancera, granadino y doctor en Ingeniería Informática, tras una larga experiencia combinando prestigiosos centros de investigación, como el CERN, la Universidad de Cambridge y la propia Universidad de Granada, con exitosas start-ups andaluzas, como Era7 Bioinformatics e IActive IT.
La idea de crear la empresa surge en Manchester, y se va fraguando poco a poco desde el 2013 al 2016 al percibir la confluencia de dos necesidades crecientes en nuestro sector. Por un lado, nuestros colaboradores médicos nos hablaban de la gravedad de las infecciones intrahospitalaria y la sepsis, enfermedades cada vez más prevalentes y graves debido a la creciente resistencia bacteriana a antibióticos. Su frustración era grande por no disponer de sistemas que identifiquen rápidamente y a bajo coste las cepas causantes de cada infección concreta. Por otro, percibimos que muchas de las técnicas de procesamiento de datos que se usaban para el análisis de proteínas y lípidos estaban algo anticuadas. La revolución del Aprendizaje Automático y la Inteligencia Artificial no parecía haber llegado a esos análisis. En 2016 Luis vuelve a Granada con la misión de dar respuesta a estas dos necesidades, y es entonces cuando nace Clover Biosoft.
– ¿Han recibido algún tipo de ayuda económica o de asesoramiento a la hora de crear la empresa?
– La acogida a la empresa por parte del Parque Tecnológico de la Salud (PTS) y su incubadora BIC Granada no pudo ser mejor. El apoyo del equipo del parque fue vital para nosotros para tener ya, a finales del 2017, un prototipo de nuestro software de identificación de cepas bacterianas. Y fue gracias sobre todo al apoyo de Lourdes Núñez, directora de transferencia del PTS, y su equipo, que logramos entrar en el proyecto europeo ACTTiVAte H2020, que nos ha dado formación y apoyo económico para convertir aquel prototipo en el producto que tenemos a punto de salir al mercado. Ahora, para la preparación de esta salida al mercado contamos con el crucial apoyo y asesoramiento del equipo del programa Minerva.
– ¿Por qué decidieron presentarse al programa Minerva de Vodafone y la Junta de Andalucía? ¿Qué esperan recibir de este programa? ¿Cuáles son sus aspiraciones en el proyecto?
– Presentarnos al programa Minerva fue una acertada iniciativa de Julio Mancera, director financiero de Clover Biosoft. Decidimos presentarnos porque siempre intentamos ser conscientes de nuestras limitaciones y debilidades, y, una vez formada nuestra red de colaboradores y en marcha el desarrollo del producto, sabíamos que necesitábamos ayuda para montar una estrategia de acercamiento al mercado exitosa con un modelo de negocio escalable y sostenible.
De Minerva ya hemos recibido mucho, en términos de formación y ayuda para mejorar nuestro plan de negocio. Estamos disfrutando mucho tanto de las sesiones de formación como del entorno que se crea entre los participantes, donde a pesar del relativamente poco tiempo transcurrido ya podemos ver que se empieza a formar una familia. Nuestras aspiraciones con Minerva pasan por aprender todo lo que podamos y aprovechar los recursos, tanto humanos como de muchos otros tipos, que Vodafone y la Junta ponen a nuestra disposición.
– ¿Qué es lo que más valoran del Programa Minerva?
– Lo que más valoramos hasta el momento es el trato personalizado a cada proyecto. Los miembros de Minerva no se limitan a darnos unas cuantas pautas generales a todos, sino que se sientan contigo, analizan tu caso concreto y te presentan retos nuevos para replantear tus ideas y salir reforzado y con estrategias más sólidas y meditadas. Además, gracias a Minerva estamos ampliando nuestra red con contactos muy interesantes, lo cual es fundamental para una empresa de naturaleza innovadora y colaborativa como la nuestra.
Sobre Clover Bioanalytical Software
El modelo de negocio de Clover Biosoft comenzó siendo de servicios. Desde el inicio de la empresa, desarrollaron software científico para grandes empresas, como la multinacional japonesa Shimadzu. Pero ahora están pivotando hacia un modelo de producto, donde se centrarán en la comercialización de la versión para investigación de su software de identificación de cepas bacterianas, en su desarrollo para alcanzar el mercado clínico y en la traslación de sus algoritmos a otros interesantes mercados como el agroalimentario o el cosmético.
Sus algoritmos se aplican sobre datos de bacterias obtenidos con una técnica analítica llamada espectrometría de masas. El uso de esta tecnología, la eficacia de nuestros algoritmos y el diseño de nuestro software les destacan sobre los competidores, sobre todo en tres conceptos clave del diagnóstico clínico: la velocidad en la obtención de resultados, el coste por análisis y la facilidad de integración con el flujo de trabajo de cualquier laboratorio de microbiología.
«Clover Biosoft no sería nada sin nuestros colaboradores repartidos por toda Europa. Podemos destacar hospitales como el Royal Free Hospital en Londres y el Hospital Gregorio Marañón en Madrid, y universidades como la Medical University de Viena y la Universidad de Granada. Desde nuestro nacimiento hemos tenido vocación internacional, y más del 80% de nuestros ingresos vienen de exportaciones, sobre todo países como el Reino Unido, Francia y Austria. Gracias a todo esto, nuestra empresa facturó más de 230.000 euros en 2017, lo que nos ha permitido crecer hasta un equipo de 6 personas. Nuestra empresa ha consolidado su estructura y procesos internos para afrontar los retos de los próximos años con las mayores garantías posibles», explican desde la empresa.