Fundada en 1891 por los monjes trapenses y responsable de la elaboración de los primeros bombones que se fabricaron en España en 1969, Chocolates Trapa inició hace ocho años un nuevo rumbo empresarial marcado por una nueva propiedad y por una filosofía corporativa basada en tres pilares: innovación, diseño y conciencia social y medioambiental. Fruto de ese compromiso con el medio ambiente y bajo el lema ‘Plantando futuro contigo’, la chocolatera ha puesto en marcha un proyecto de colaboración con la organización sin ánimo de lucro (R)Forest Project y diferentes partners locales para contribuir a reforestar España a través de la plantación de cerca de 10.000 árboles –que cuando crezcan serán capaces de absorber una media de 50.000 toneladas de CO2 al año– entre las localidades de Dos Hermanas (Sevilla), Alzira (Valencia), Madrid capital y Villamuriel de Cerrato (Palencia).

Según la FAO, cada año desaparecen del planeta 8,8 millones de hectáreas de masa forestal –una superficie superior a toda Andalucía– debido a diversos factores como el cambio climático, la construcción de infraestructuras, el crecimiento de zonas urbanas, el aprovechamiento de la madera con fines industriales, el aumento de los límites agrícolas y ganaderos o los incendios, ya sean provocados o por causas naturales. En este contexto, la reforestación del territorio es vital para mejorar nuestra calidad de vida: los bosques sirven de hábitat para las diversas especies, mitigan los efectos del calentamiento global y la desertificación –al mantener estables la humedad y los nutrientes del suelo– y son los pulmones de la Tierra, ya que liberan oxígeno y toman del aire el dióxido de carbono. De hecho, un árbol de unos 5 m3 puede absorber cinco toneladas de CO2 al año, las que se producen aproximadamente durante cinco vuelos de ida y vuelta entre Madrid y Nueva York.

El proyecto de Chocolates Trapa pretende combatir la crisis climática plantando ejemplares autóctonos en zonas desarboladas en las que las condiciones del suelo dificultan una regeneración natural del bosque. En Sevilla se ha elegido el parque de La Colina, una ruta de 4.5 km cercana a Montequinto –barrio situado al norte de Dos Hermanas, limitando con Sevilla y Alcalá de Guadaira– afectada por las sequías causadas por el cambio climático. Su reforestación tuvo lugar el pasado 14 de noviembre en un acto festivo al que asistieron los concejales de la localidad Rosa María Roldán (Medio Ambiente) y Juan Pedro Rodríguez (Juventud, Salud y Consumo), los tenientes de alcalde Fátima Murillo (distrito de Quinto), Antonio Morán (Movilidad y Limpieza Urbana) y Juan Antonio Vilches (Hacienda y Participación Ciudadana), Ernesto Sánchez Luna, técnico de Medioambiente de Dos Hermanas, el director de comunicación y relaciones públicas de Chocolates Trapa, Ángel Amador, el delegado comercial de Andalucía de Trapa, Eduardo Casado, Fernando Ojeda, fundador de (R)Forest Project, y el presidente, Vicente Martín, y la directora de Marketing, Delia Pascual Salvador, de Grupo MAS, empresa familiar con más de 48 años de experiencia en el sector de la distribución alimentaria, con una red comercial de más de 175 establecimientos en Andalucía y Extremadura bajo sus marcas comerciales MAS, MAS&Go, Cash Fresh, Mökai, SanTomás, ALtrigo y Catering SanTomás, que ha colaborado con la firma chocolatera en el proyecto. Además, numerosas familias de la zona acudieron para participar en la plantación de 2.000 ejemplares –que ocupan en torno a seis hectáreas de terreno– de encinas, alcornoques y plantas ornamentales, concretamente, lentiscos y almeces.

Sobre Trapa
Fundada en 1891 por los monjes trapenses, Trapa es una de las firmas chocolateras más icónicas y queridas de nuestro país. Una empresa pionera y 100% española que a partir de 2013 inició un nuevo rumbo de la mano de una familia palentina que quiso invertir en su tierra y modernizar la marca y su portfolio en base a tres pilares: innovación, estilo y conciencia social y medioambiental. En la actualidad Trapa cuenta con 150 trabajadores, con más de 120 distribuidores en España y con presencia en 50 países (entre los que se encuentran Italia, Polonia, Países Bajos, Suecia, Hungría, Kuwait, Egipto, Israel, Corea y Japón) así como con un portfolio de 290 referencias que son el resultado de una fuerte inversión en industria e I+D+i y de la mejora en las formulaciones que, inspirándose en la artesanía y el savoir faire de 129 años de historia, buscan siempre mejorar el sabor.

Entre sus productos destacan sus bombones cortados (que fueron los primeros bombones que se elaboraron en España en 1969 y que no contienen aceite de palma), los Bombonísimos (también sin aceite de palma y de un gramaje superior al del clásico bombón belga), sus bombones sin azúcar y sin aceite de palma, su gama de tabletas Intenso, la gama de tabletas con estevia, sus tabletas 0% azúcares añadidos, su chocolate en polvo (que se presenta en una lata gourmet de diseño vintage) y las gamas TrapaKids y Trapamilk (también sin aceite de palma) especialmente pensadas para los más pequeños de la casa. Todos los chocolates Trapa son además sin gluten y libres de grasas hidrogenadas y de ácidos grasos trans.