Acabamos de dar carpetazo a un año complicado en el que las personas y empresas están demostrando su resiliencia. Y en esta delicada coyuntura, tiene más sentido si cabe el Premio Capital Humano Andaluz, galardón que reconoce el talento y liderazgo de profesionales andaluces, orgullosos de serlo, y que trabajan fuera de Andalucía y/o de España. En su tercera edición, este premio ha recaído en el General de Brigada Carlos Salgado Romero, Segundo Jefe de Estado Mayor y Jefe de la División de Logística del Cuartel General Aliado de Reacción Rápida (Reino Unido). Un reconocimiento más que sumar a las numerosas condecoraciones nacionales y extranjeras que el General Salgado ha recibido a lo largo de toda su trayectoria.

Tras dedicar unas palabras al homenajeado, el presidente de Andalucía Económica, Tomás de la Cruz, leyó el acta del jurado, integrado por Manuel Contreras, presidente de Azvi; Antonio Carpintero, consejero delegado de Clínica Cuve; Estanislao Martínez, presidente de AGQ Labs & Tech; Gonzalo Guillén, consejero delegado de Acesur; Alberto Pérez, socio director de MA Abogados; Luis Fernández, socio director en Andalucía de PwC; Vicente Granados, director general de Instituto Español; José María Domínguez, director general de Refractarios Alfrán; y Antonio Lappí, director general de Grupo Lappí.

Intervino a continuación Pilar Manchón, directora de Estrategia de Investigación en Google AI y ganadora del II Premio Capital Humano Andaluz. Ante la imposibilidad de viajar a Sevilla por la pandemia, esta directiva detalló, en video, el extenso curriculum del general Carlos Salgado, que aunque nació en Madrid, recaló en Andalucía, concretamente a Melilla, con apenas dos meses de vida. Posteriormente vivió Jerez y con dos años llegó a Sevilla, donde residió hasta 1982, cuando con solo 19 años ingresó en la Academia General Militar de Zaragoza. En esta ciudad se crió en el barrio de Heliópolis, se aficionó al Betis y conoció a su mujer, Ana, con la que ha tenido tres hijos.

Como buen militar, Carlos Salgado ha tenido diferentes destinos: Melilla, Ronda, Córdoba, Bosnia Herzegovina, Kosovo… Entre 2004 y 2007, sus últimos tres años como Comandante de Estado Mayor, los pasa en el Cuartel General de la OTAN en Nápoles, y como especialista en Operaciones de Información realiza diversas operaciones en los Balcanes y en centros de enseñanza OTAN en Europa.

Regresa a Sevilla como Teniente Coronel, donde permaneció dos años, y en 2009 vió colmada otra de sus máximas ilusiones al concederle el mando de la VIII Bandera de La Legión en Viator, Almería, unidad con la que desplegó durante 7 meses en Afganistán. En 2012 regresa al Cuartel General de Plaza de España de Sevilla y asciende a Coronel en 2014. Esta vez permanece aquí para hacerse cargo del Área de Operaciones de la Fuerza Terrestre del Ejército. Serán tres exigentes años que culminarán con su ascenso a General de Brigada y su destino a Reino Unido en julio de 2018.

Actualmente está destinado en la localidad inglesa de Gloucester como Segundo Jefe de Estado Mayor y Jefe de la División de Logística. Tiene bajo su mando a un centenar de subordinados de trece naciones aliadas, incluyendo a tres compatriotas con los que forma la pequeña familia española en Gloucester. Su responsabilidad es la de planear y dirigir el apoyo logístico y las operaciones de retaguardia para este Cuerpo de Ejército asignado a la OTAN.

Pero además de esta fuerte vinculación profesional con Andalucía, al General Salgado le unen lazos afectivos con esta tierra, pues aquí pasa largos periodos vacacionales. Además, su esposa es granadina, y sus tres hijos, Ana, Carlos y Sergio son malagueños. Este último está actualmente en la Academia General del Aire y podrá vestir el uniforme de Teniente del Ejército del Aire en 2023. Ya son cinco las generaciones de la familia Salgado que han servido en las filas de nuestro Ejército.

En su intervención, el homenajeado se mostró “sorprendido, porque yo solo cumplo con mi obligación”, y dedicó el premio a “todos los militares que realizamos nuestra labor fuera de nuestra patria”. Recordó asimismo a todos esos españoles, “héroes anónimos” que se van de su tierra y ponen el nombre de España y Andalucía donde se merecen.

El general Salgado es “un creador de equipos”, como lo definió el presidente de Andalucía Económica. Y el mismo premiado reconoció que al equipo hay que ponerlo en valor, “a veces no lo puedes elegir, pero sí modelarlo y sacar todo su potencial”. En su opinión, hay que potenciar los valores positivos de las personas y minimizar lo negativo. “Tenemos que crear líderes en todos sitios en el día a día. Tenemos que ser cazadores de corazones más que cazadores de mentes brillantes. Es muy importante mandar con el corazón”, subrayó.

El general Carlos Salgado dedicó parte de su discurso a hablar de liderazgo, y en este sentido destacó la importancia de la inteligencia emocional. “Hay que detectar los miedos y riesgos que hay en cada equipo, la inteligencia emocional es parte innata de un líder pero también se entrena.Y nos entrenamos hablando y escuchando a nuestra gente, lo que les hace sentirse parte importante del equipo, de la organización. Tenemos que tener los sensores para detectar riesgos y mitigarlos cuando aparezcan, ésa es la inteligencia emocional. Gracias ella tenemos que saber qué equipo tenemos, a quién estamos liderando”, indicó. Y añadió que un buen líder debe influir positivamente en el equipo, pero también delegar sin manipular. Y como en el ejército siempre se ha hablado de liderazgo, el broche final de su discurso fue el poema ‘El soldado español de los tercios’, de Calderón de la Barca, poeta y soldado del siglo XVII.

Cerró el acto el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, aplaudiendo el acierto de Andalucía Económica “en distinguir a un militar, por lo que representan en este país las Fuerzas de Seguridad el Estado”. Marín se deshizo en halagos hacia el premiado – “eres un referente en valores, en integridad en compromiso y lealtad. Ejemplo para la inmensa mayoría de muchos jóvenes andaluces–” y destacó que “hay mucho talento y capacidad en esta tierra que no hemos sabido reconocer. Es importante promover estos valores que tienen que ver con personas que tienen un sueño y son capaces de cumplirlos”.

En clave política y económica, el vicepresidente andaluz instó a apostar por el futuro, por el emprendimiento y por la internacionalización. Y señaló que aunque este año el PIB nacional y español caerá en torno a un 13%, “2020 no ha sido un año perdido, sino ganado para la recuperación y para el cambio”.

Con el presupuesto ya aprobado para 2021 –Andalucía ha sido la primera autonomía en hacerlo– y los fondos Next Generation de la UE, se estima que Andalucía crezca este año más de un 7% y lo mismo en 2022, para poder recuperar los niveles previos a la pandemia. “Es necesario un importante esfuerzo por parte de todos, sociedad civil e instituciones, tenemos que trabajar todos de la mano y reinvertarnos, porque el Covid no nos puede vencer. Tenemos que apoyarnos en la seguridad que nos dan las vacunas, necesitamos adaptarnos a la exigencias de este nuevo mundo”, concluyó Marín.